CCOO de Extremadura centrará su actuación en el impulso del Pacto Político y Social para que se acometan con urgencia las reformas estructurales que necesita la economía extremeña y en desbloquear la negociación colectiva con la patronal. Así fué manifestado por Julián Carretero, el secretario general de CCOO de Extremadura, quien indicó la profunda preocupación del sindicato por la forma errática que el Gobierno de Rodríguez Zapatero está mostrando a la hora de afrontar la crisis económica y reclamó recupere el pulso para activar la economía y el empleo "ante la complicadísima situación con la que nos encontramos a la vuelta del verano".
En cuanto a Extremadura, indicó que a juicio de CCOO, el Pacto Político y Social propuesto por el presidente extremeño tiene que incidir necesariamente en una serie de reformas estructurales que eliminen los cuellos de botella de la economía extremeña y permitan encarar el futuro con mejores perspectivas.
Así, señaló que se ha trasladado a la Junta que este proceso debe concretarse con reformas en el sector primario, en el forestal, en el agroganadero, y de una manera especial en el sector industrial, sobre todo en todo lo relativo al el sector agroalimentario.
En ese sentido, Carretero resaltó que para lograr la reactivación económica hay que potenciar aquellos sectores y aquellas empresas que crean empleo de calidad y que sustentan el tejido productivo, y por ello, apostó por hacer del sector industrial el eje fundamental de la economía, y conseguir así ser más competitivos.
Para que esto sea posible, añadió, es necesario que se produzcan avances significativos en la formación del capital humano, en la gestión y dimensión de las empresas y en la acumulación del suficiente músculo financiero que soporte los proyectos empresariales de la suficiente envergadura.
Al respecto, Carretero destacó que el mejor planteamiento de economía sostenible en Extremadura y en España debe pasar por potenciar aquellos sectores y aquellas empresas que crean empleo de calidad y sustentan el tejido productivo, y por eso, apostó por hacer del sector industrial el eje fundamental de la economía.
"Todo esto pasa por que los proyectos industriales en Extremadura que necesitan reforzarse se refuercen, y aquellos que en este momento están todavía pendientes de alguna cuestión administrativa definitivamente empiecen a ver la luz cuanto antes, como el de refinería", aclaró.
Igualmente, apostó por reformas en el sistema administrativo de la región que hagan desaparecer las trabas ilógicas actuales y un apoyo considerable al sistema educativo y universitario, ya que "la formación de las personas es fundamental y hay que hacer una recuperación clara de los valores del esfuerzo y del trabajo".
Para llevar todo esto a cabo, también es fundamental para CCOO, despejar las dudas respecto al sistema financiero extremeño, abordando definitivamente aquellas cuestiones en materia de fusiones que permitan al tejido productivo de la región tener un horizonte claro con el que emprender inversiones de calado.
Carretero considera que las reformas deben alcanzar también a ámbitos como el sector energético, el del agua y el de transporte, donde no sólo hay que exigir la finalización rápida del tren de alta velocidad sino un reforzamiento de la red ferroviaria interior que extienda a toda la comunidad los beneficios de la línea de mercancías y personas.
La segunda gran cuestión en la que se centrará CCOO en las próximas fechas, junto con su Confederación a nivel nacional, será la de desbloquear la negociación colectiva con la patronal, a la que reclamó responsabilidad.
Julián Carreteo anunció que el próximo 7 de octubre CCOO realizará movilizaciones en toda España coincidiendo con la Segunda Jornada Mundial pro el Trabajo Decente, además de plantear, a corto plazo, a UGT acciones conjuntas.
En cuanto al Diálogo Social, explicó que cree que es necesario que se retome, pero advirtió que "Zapatero debe tiene que ir más allá de buscar unas meras fotos".
Para Carretero hace falta un acuerdo global que le imprima seriedad y confianza al conjunto de la economía, para que España vuelva a ser atractiva, y eso pasa por un acuerdo global que toque todos los aspectos fundamentales del proceso económico, fundamentalmente la política fiscal.
En este sentido y en relación a tanto anuncio de subir o no los impuestos indirectos, Carretero exigió al Gobierno central a que "deje de marear la perdiz, y que ponga encima de la mesa lo que va a ser su planteamiento fiscal", en definitiva, que el Ejecutivo estatal lleve a cabo una armonización fiscal, en la que también tienen un papel que jugar las comunidades autónomas.
Por ello, Carretero defendió la recuperación de impuestos que no se deberían haber eliminado; evitar la economía sumergida; y planteamientos que pasen por "darle la vuelta a todo lo que ha sido la cuestión de establecer sociedades fiscales para amparar impuestos".
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