lunes, octubre 03, 2011

La extensión, organización y actuación de CCOO fue posible por la decisión del PCE.

El pasado Jueves se presentó en Madrid  el libro de Juan Moreno "Comisiones Obreras en la Dictadura" un relato militante de quienes fueron protagonistas activos de la lucha sindical en el franquismo. El libro nos recuerda de dónde viene Comisiones Obreras, aquel movimiento sociopolítico que supo aunar la inteligencia colectiva para luchar contra la dictadura y alumbrar la democracia en España.

Rodolfo Benito, Julian Ariza, Juan Moreno, Ignacio Fernánez, Nati Camacho y Nicolás Sartorius
El libro es un documento imprescindible para conocer un periodo crucial de la historia de española,  la lucha por las libertades en la dictadura franquista y conocer a sus protagonistas. Es el relato de la aplicación de la inteligencia colectiva, de la militancia, de la participación activa del mundo del trabajo con un objetivo claro, conseguir los derechos y libertades fundamentales y la libertad sindical.

La presentación fue una oportunidad de compartir un tiempo con muchos y muchas de los protagonistas de esta historia colectiva, para conocer anécdotas, como la noche que Marcelino Camacho paró las máquinas de la imprenta donde se estaba elaborando un material del sindicato ¿El motivo? ¡Que el material estaba saliendo en amarillo y no en rojo! - hasta que le explicaron que para conseguir el color rojo es imprescindible combinar el  amarillo y el magenta-. O  el carácter colegiado de todas las decisiones, discusiones hasta la saciedad, tanto para dar a luz el primer logo del sindicato,  el “pulpo” tarea colectiva que supuso cientos de horas de debate para que estuvieran representados todos los sectores productivos, como para conformar la organización de las Comisiones Obreras, llegándose a plantear que su orientación estratégica debía ser el de una organización no reivindicativa en la empresa, pues la consecución de mejoras concretas en la empresa no solucionaba el conflicto capital-trabajo, las reivindicaciones debían tener un carácter sociopolítico transcendiendo de la empresa, que permitirá una verdadera transformación de la sociedad, superadora de la explotación del hombre por el hombre.
Cartel de los del 1001

En el acto pudimos escuchar cualificadas intervenciones,  como la de Julian Ariza, uno de los promotores del libro y autor de la introducción, quien recordó que es imprescindible saber de dónde venimos para saber a dónde vamos. Reivindicó el papel del PCE en la configuración de las CCOO, trabajando codo con codo, con cristianos de base y con otras organizaciones sindicales como la USO. En este sentido quiso dejar constancia que lejos de la aparente espontaneidad con que se ha glosado frecuentemente la aparición de Comisiones Obreras, "la extensión, organización y actuación de CCOO fue posible por la decisión del PCE de volcarse en su apoyo". 

Nati Camacho, una histórica militante de las  CCOO juveniles y de CCOO del textil, evocó aquellos tiempos de resistencia, cárcel y sacrificio de los dirigentes del sindicato, y animó a seguir su ejemplo y no ceder ante el chantaje de las instituciones financieras y los mercados

Eduardo Saborido, uno de los protagonistas de aquellos tiempos y de la extensión de las Comisiones Obreras a Andalucía, tras valorar la utilidad del libro comentó que:"Dijimos y decimos NO a las políticas de recortes de Zapatero y de los gobiernos que sigan ese camino, con la legitimidad de quienes pusimos nuestro grano de arena para conquistar la democracia".

Algunos de los asistentes al acto
Por su parte Nicolás Sartorius, otro de los mentores del sindicalismo de CCOO, se detuvo  especialmente en el papel único y clave de las Comisiones Obreras, tras la muerte de Franco, en el que el monarca nombra a Arias Navarro como presidente del gobierno, quien intentó prolongar el franquismo sin franco. La historiografía oficial  repite que un pacto de dirigentes políticos en palacio acabó con esa pretensión, pero Sartorius afirma que "Sin las movilizaciones obreras por todo el país en las que CCOO tuvo mucho que ver, la democracia no hubiera sido posible". 

El acto finalizó con la intervención de Ignacio Fernández Toxo, quien reivindicó el hecho sindical y el papel del sindicato en momentos de abierta hostilidad contra el movimiento obrero. Destacó que el libro de Juan Moreno, no era una historia excluyente, pues  "analiza con respeto el papel de otras fuerzas sindicales en la dictadura como USO y UGT". Se mostró convencido de que a pesar de la dura crisis y de las dificultades  a las que debe hacer frente el movimiento sindical, sabremos salir de ambas abriéndonos a la sociedad civil. Proponiendo nuevamente, “la creación de una amplia plataforma para defender el estado social frente a los ataques que están sufriendo los servicios públicos y la protección social".
 
El acto finalizó con la intervención del autor, Juan Moreno Preciados, quien relató anécdotas como que "la casa del cantante Luis Aguilé o el despacho del marqués de Villaverde en el Hospital de La Paz, fueron escenario de "la conspiración de CCOO contra el régimen". Moreno finalizó pidiendo que se leyera el libro.