jueves, octubre 29, 2015

Cinco años sin Marcelino Camacho, uno de los forjadores de Comisiones Obreras.

Marcelino Camacho en  Calamonte (Badajoz) 1977.

Marcelino Camacho Abad (Osma la Rasa, Soria, 1918). Sindicalista. Se crió en el pueblo aragonés de Ariza, donde su padre era ferroviario. En 1935 ingresó en el Partido Comunista de España (PCE), compromiso que le llevó a luchar en el bando republicano durante la Guerra Civil de 1936-39. 


Tras la derrota de la república española, fue juzgado y condenado por el franquismo, siendo encarcelado para posteriormente ser asignado a un batallón de trabajos forzados en Tánger. Se evadió de un campo de concentración franquista y pidió asilo político en la Argelia francesa.

En 1957 fue indultado y regresó a España, trabajó como obrero metalúrgico en la empresa Perkins Hispania como fresador, si bien progresaría profesionalmente hasta obtener la categoría de asimilado a ingeniero técnico. En Perkins resultó elegido enlace sindical, poco tiempo después seria elegido vocal del jurado de empresa en 1960 y 1963.

Como el mismo ha señalado en numerosas ocasiones, su puesto, primero como enlace y después como vocal jurado, le daba cierto margen para moverse por la factoría. Esto le permitía, a su vez, el contacto con los compañeros, pulsar su estado de ánimo y sus demandas, así como tratar de organizarles.

Si se revisan las actas del Jurado de Perkins de esos años, en los que la influencia de Camarcho y de algunos de sus compañeros, como Julián Ariza, era hegemónica, llamará la atención el modo en que se fundamentaban las reivindicaciones obreras. Detrás  de cada petición salarial, por ejemplo, había un modesto estudio de la cesta de la compra familiares, así como de la evolución de lo que entonces se llamaba el coste de la vida.

Marcelino Camacho rueda de prensa en Badajoz 1985
No tardó mucho tiempo en producirse el salto sindical, de la empresa al ámbito provincial de Madrid, comenzando a frecuentar los locales del sindicato provincial oficial, situados en la Gran Vía de Madrid. Además de exponer sus ideas a los jefes del Vertical, les servía para coordinarse entre sí. La Comisión de Enlaces y Jurados del Metal pronto pasaría a denominarse Comisión Obrera del Metal.

Hacia 1967 el modelo de las Comisiones Obreras estaba ya definido. A ello contribuyó la aprobación de una serie de importantes documentos, discutidos inicialmente por las Comisiones de Madrid. Se trata de: Ante el futuro del sindicalismo, ¿Qué son las Comisiones Obreras?, etc.

Es detenido 1967 por su acción sindical; encarcelado durante nueve años por la dictadura. Según los pasajes que Marcelino dedicó en sus memorias a su estancia en la cárcel nos podemos dar cuenta del perfil militante que encarna. Se trata del perfil de la militancia obrera clásica, forjada en la disciplina, en la sobriedad y la tenacidad, con un fuerte empeño autodidacta por aprender y comprender el mundo en el que vive y que desa transformar.

Tras un breve periodo de libertad, Marcelino vuelve a ser detenido el 24 de junio de 1972, en el convento de los frailes oblatos de Pozuelo de Alarcón, a las afueras de Madrid, junto a otros diez dirigentes. Todos ellos había acudido desde distintos puntos del país, a una reunión de la Coordinadora General de Comisiones. Todos son internados en la Cárcel de Carabanachel. Fue el sumario 1001. El fiscal pidió  más de 160 años de cárcel para los diez. La defensa de Marcelino la asumió Joaquín Ruiz-Jiménez, al que conocía de sus tiempos de Perkins, pues Ruiz-Jiménez presidió esa empresa hasta el año 1963, cuando es destituido por colocarse al lado del Jurado de Empresa en una demanda contra la dirección.

La vista para el juicio se fijó para el 20 de diciembre de 1973. Justo en la mañana de ese día se produjo la muerte del presidente del gobierno, Carrero Blanco en un atentado de ETA. El atentado impidió la gran movilización prevista de solidaridad de los trabajadores. Les condenaron a 20 años de cárcel, destinados a escarmentar el movimiento de las Comisiones Obreras.

Cuando el movimiento de Comisiones Obreras se convierte en  sindicato a través de la Confederación Sindical de Comisiones Obreras, Camacho es elegido su secretario general (1976). 

Marcelino fue, asimismo, elegido diputado por el PCE en el Congreso en la legislatura constituyente, la que se inició tras las elecciones generales del 15 de junio de 1977. Repitió en la siguiente legislatura, la que tuvo lugar tras las elecciones generales de marzo de 1979. En ambas ocasiones concurrió en segundo lugar tras Santiago Carrillo.
Marcelino Camacho en Plasencia en 1991
Durante su largo periodo al frente de Comisiones Obreras consolidó el sindicato como fuerza sindical mayoritaria, iniciándose un lento pero sostenible proceso de unidad de acción con la Unión General de Trabajadores. En 1987 cede el paso al joven Antonio Gutiérrez, que asumió la Secretaría General.
Visita Extremadura en numerosas ocasiones, donde siempre que se le llama acude con su inseparable Josefina. Ambos disfrutan contando sus experiencias. 

Una de sus explicaciones preferidas, se refiere al componente sociopolítico de CCOO con su correspondiente ejemplo, a saber:
CCOO es una organización sociopolítica como las Patatas cocidas, que no dejan de ser patatas cuando se le añade carne (patatas con carne). Por el contrario Izquierda Unida tampoco deja de ser carne porque se le añada patatas, (Carne con patatas). En su pensamiento ambos tienen los mismos componentes pero con distinta intensidad, esta es la marca de diferencia ( CCOO organización socioplítica, IU organización politicosocial).

Las imágenes que acompañan esta reflexión corresponden a dos momentos de su presencia en Extremadura: la primera en Calamonte en el Año 77,  dirigiéndose a los jornaleros desde el remolque de un tractor. La segunda en uno de sus viajes a Extremadura, en rueda de Prensa en Badajoz en 1995, con el Secretario Provincial de CCOO de Badajoz, Justo Vila Izquierdo y el Secretario Regional Alejandro Nogales. La tercera en Plasencia en el año 1991, reunido con los sindicalista locales  y regionales (En la imagen Guillermo Tato y Valentín García).

Vídeo homenaje a Marcelino Camacho