viernes, octubre 12, 2012

El película "El Tren de la memoria", disponible en youtube









Recientemente se ha puesto a disposición de los internautas la película documental El tren la memoria, del año 2005.  Ochenta y cinco magníficos minutos de filmación dirigidos por Marta Arribas y Ana Pérez, en que se relata la emigración a Europa de los años sesenta del pasado siglo, a través de entrevistas a protagonistas de aquel éxodo, con el hilo conductor de un tren que lleva a uno de ellos, Josefina, con destino a Núremberg, recuperando también imágenes  del NODO, que documenta el éxodo del momento.

Es un viaje también a nuestra historia como pueblo, que tuvo que enviar a sus hijos a lo desconocido: de nuestro campo a un territorio de dificultad, alienante, fordista; de aquella vida tan dura en barracones, de aquella falta de infraestructuras, comodidades, comprensiones…  los autobuses piratas que tardaban 22 horas en dejar a nuestros paisanos en los núcleos industriales; las cadenas productivas tan diferentes del trabajo agrario del que procedía la inmensa mayoría; los barrios de latas, barracas, chabolas, sin servicio alguno; las marginalidad… situación relatada magníficamente por el escritor Francisco Candel en la novela Donde la ciudad cambia su nombre,  de la emigración en Cataluña, y que en Extremadura ha estudiado el amigo Moisés Cayetano Rosado.

La película describe el origen de aquellas mujeres, una de ellas extremeña, el viaje, la solidaridad de las organizaciones sindicales, la militancia, la integración, la no integración, la nostalgia, la felicidad y la infelicidad.

Y el final una crisis -os suena verdad-, en este caso aquella de los 70 que dejó en el paro a emigrantes y autóctonos; nos trajo: el que “nos quitan el trabajo”; el retorno difícil y muchas veces imposible -nos sigue sonando... 

Volvamos a disfrutar de la película, para vernos, analizarnos, para comprenderlos y comprendernos, para animarnos y luchar, luchar, luchar, para que no tengamos que volver a repetir aquello de aquella manera, para que nuestros jóvenes españoles, portugueses, griegos o italianos, como los americanos, africanos o asiáticos que nos acompañan tengan un presente y un futuro con derechos y dignidad.