jueves, febrero 26, 2009

Funcionamiento del Seguro de desempleo

La situación de desempleo que vive el país y en particular Extremadura es crítico. Por ello es especialmente doloroso contemplar debates sobre la flexibilización de los despidos, cuando tenemos las caras de los hombres y mujeres sufriendo por vivir esta situación.

Paso a describir, de manera orientativa el funcionamiento del sistema de protección por desempleo, respondiendo al quién, el cómo, el cuando y el Cuanto, de las citadas prestaciones por desempleo:

1. Quién. Los trabajadores y trabajadoras que hayan sido despedidos legalmente, y que hayan cotizado por desempleo por un mínimo de 360 días dentro de los seis años anteriores a la situación de desempleo.

2. Cómo y cuando. Acreditando la finalización de un contrato temporal. Acreditando igualmente el despido o extinción del contrato en periodo de prueba, o por suspensión temporal de empleo o reducción de la jornada en un expediente de regulación de empleo (ERE).

El abandono voluntario de un trabajo no genera derecho a la prestación en ningún caso, salvo cuando se produce traslado del centro de trabajo que exija cambio de residencia u causas consideradas justas judicialmente.

Una vez cumplido los requisitos anteriores el trabajador/ra deberá inscribirse como demandante y solicitar la prestación en los 15 días siguientes a producirse la situación de desempleo. El INEM reconocerá la prestación y la oficina de empleo correspondiente comunicará al trabajador/a, la cuantia del dinero que le corresponde y el periodo de cobro.

3. Cuánto. La cuantía contributiva será del 70% de la base reguladora del trabajador durante los 180 primeros días del cobro. A partir del día 181, se recibirá el 60%. La base reguladora de esta prestación se calcula con el promedio de las bases de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales por las que cotizó el trabajador durante los 180 días anteriores a la perdida del empleo.

La cuantía mínima de la prestación para el año 2009 es de 492,08 euros al mes; mientras que el tope máximo es 1.383,99 euros al mes. El sistema hace frente a las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social del parado y el 35% de la cuota del trabajador. La duración oscila entre los cuatro meses de mínimo, si se han cotizado 360 días y un máximo de dos años, con seis años cotizados.

4. El Subsidio. Si no se ha cotizado los días mencionados para recibir la prestación contributiva, se puede cobrar el subsidio por desempleo. Para ello debe haberse cotizado por desempleo al menos tres meses, si se tienen hijos y 6 meses, si no se tienen. Además se debe carecer de rentas de cualquier tipo, superiores al 75% del salario mínimo interprofesional (624 euros al mes en 2009).

Los principales colectivos con derecho a este subsidio son quienes han agotado su prestación contributiva y tiene responsabilidades familiares y los que agotaron su prestación, sin cargas familiares y son mayores de 45 años. El subsidio más extendido es el de mayores de 52 años (hasta que se alcance la edad de jubilación y es de 421,79 euros mensuales en 2009).

Más información:

El Ministerio de Trabajo cuenta con un sistema de autocálculo de la prestación por desempleo en internet, en la dirección: http://www.inem.es/DGSimuladorWeb/ jsp/SimEntradaSimulador. jsp

jueves, febrero 19, 2009

Las ejecutivas de CCOO y UGT de Extremadura acuerda reforzar la unidad de acción para frenar la destrucción de empleo

CCOO y UGT de Extremadura han acordado trabajar conjuntamente en once áreas concretas para contribuir a la defensa de los derechos de los trabajadores y detener la sangría del desempleo y actuará con contundencia en aquellas situaciones en las que se pretenda vulnerar los derechos laborales o se busque destruir empleo de manera injustificada al albur de la crisis Reforzar la unidad de acción de CCOO y UGT en Extremadura, para hacer frente a la dificil situación laboral y económica que atravesamos, es un buen mensaje para los trabajadores y trabajadoras que han perdido su empleo en los últimos meses o que temen que les termine por afectar.
CCOO y UGT de Extremadura han acordado incidir en once áreas concretas para afrontar las consecuencias negativas de la crisis, contribuir a la defensa de los derechos de los trabajadores y detener la sangría del desempleo.
Entre estas medidas quiero destacar la petición al Gobierno Central y a la Junta de Extremadura, de acelerar las inversiones previstas en nuestra comunidad y exigir a las empresas adjudicatarias de estas infraestructuras un compromiso social que garantice la estabilidad en el empleo y las condiciones laborales.
Se insiste igualmente en maximizar la creación de empleo del Fondo de Inversión Local gestionado por los ayuntamientos.
Me parace muy importante la actuación para conseguir la creación de un salario social para aquellas personas sin trabajo que se queden sin ninguna prestación por desempleo.
También han decidido trabajar para que la Formación Profesional incida especialmente en los colectivos más afectados por la crisis económica para facilitar su incorporación al mercado laboral.
Se acordó igualmente posiciones únicas en la negociación de los convenios colectivos a la hora de defender el mantenimiento del empleo y del poder adquisitivo y reclamarán a la Junta de Extremadura una actuación más decidida para enfrentarse al crecimiento de la economía sumergida y del fraude en la contratación.
Ambos sindicatos reiteraron su posición inicialmente favorable a la fusión de las cajas de ahorros extremeñas, siempre que garantice que beneficia a los intereses generales de la región y se llega a un acuerdo laboral previo.
Igualmente los reunidos exigen la aplicación de la Ley de Autonomía Personal y Dependencia en la región, con el fin de impulsar la atención a los afectados y su incidenca en la creación de empleo.
El secretario general de CCOO de Extremadura, Julián Carretero, advirtió que ambos sindicatos coinciden en que actuarán a través de la movilización y la presión con “contundencia” en todas aquellas situaciones que signifiquen atentar contra las condiciones laborales de los trabajadores y las trabajadoras y frente a las reducciones de empleo, especialmente en aquellas empresas que se excusen en la crisis para limitar su plantilla sin justificación real.
Otro aspecto que me parece importante señalar, es que se indicó que los actos y movilizaciones que se van a suceder en las próximas fechas van a estar fuertemente marcadas por la reivindicación sindical de mantener el empleo y consolidar la protección social. En ese sentido, señaló que las fechas del 8 de marzo, día internacional de la mujer, el 28 de abril, día internacional de la salud laboral, y el 1º de mayo, día internacional del trabajo, serán citas que, más allá de su mensaje particular, se enfocarán a defender y reivindicar estas cuestiones. Destaco este aspecto porque quiero recordar que estos días nacen en sutuaciones como la presente para mostrar las reivindicaciones y fuerza de la clase obrera organizada. El mantenimiento y reforzamiento de jornadas como el 1º de Mayo, son esenciales y traspasan las cuyunturas puntuales, dando identidad y conciencia de clase, a quienes comparten un mismo destino. Ser trabajadores y trabajadoras.
Carretero anunció, además, que el próximo 14 de mayo se celebrará una movilización a nivel europeo que en España se focalizará en Madrid a las que se unirán los sindicatos extremeños. Desde Comisiones se advirtió que en estas citas “se denunciarán y se combatirán los planteamientos retrógrados que se están escuchando de las patronales y otras instancias como la modificación de los Expedientes de Regulación de Empleo, el abaratamiento del despido, o el incremento de la avaricia empresarial, porque todo ello, al fin y al cabo, implica destrucción de empleo”.
Los sindicatos comparten que es más necesaria que nunca la unidad de acción y que CCOO y UGT sean una sola voz para defender a los trabajadores”.
Frente a quienes pretenden que se convoque ahora una huelga general, los máximos responsables de los dos sindicatos indicaron que hoy no tiene sentido, pues por el momento el Gobierno está actuando bajo el Diálogo Social y no adoptando medidas unilaterales que atenten contra los derechos de los trabajadores. Y yo estoy de acuerdo.

martes, febrero 17, 2009

Entrevista a Julian Carretero. Secretario General de CCOO de Extremadura

A cointinuación reproduzco la intrevista publicada por el Diario Hoy de Extremadura, al Secreario General de CCOO de Extremadura
Julián Carretero (Higuera la Real, 49 años) afirma que a la crisis no se la combate con una huelga general. Este maestro dedicado al sindicalismo desde hace años reconoce que también las centrales sindicales tienen que cambiar y estar más presentes en las empresas. Su preocupación es la facilidad con que se destruye empleo. En España y especialmente en Extremadura. Carretero, que lleva casi cinco años como secretario general de CC.OO. en la región, optará a un nuevo mandato en el congreso que se celebra el 12 de marzo en Mérida. Su reelección está asegurada dado que la suya será la única candidatura.
-Hay mucha gente que se pregunta qué están haciendo los sindicatos ante la crisis económica. -Los sindicatos están donde tienen que estar, movilizándose en aquellos sitios donde la movilización es la solución, y también en las empresas, que es donde se destruye el empleo, estudiando sus cuentas y su viabilidad.
-¿No es el momento de una huelga general, como podrían pensar algunos? En Francia la han hecho. -Son situaciones diferentes. Aquí hay un proceso de diálogo social abierto donde las posiciones del gobierno son mucho más sociales que las de cualquier otro gobierno europeo. Las tesis sindicales de darle más cobertura al desempleo y que las políticas públicas se utilicen para crear empleo se están aceptando. ¿Una huelga general para qué?
-¿Sería sólo una protesta, un modo de sacar la rabia por la pérdida de empleos, o serviría para algo? -Cualquier movilización es necesaria siempre que sea útil. Los sindicatos nunca nos hemos movilizado por pataletas. Las movilizaciones por una pataleta pueden ser contraproducentes. En Extremadura estamos negociando con el Gobierno todas las medidas y estamos trabajando en los centros de trabajo. Otra cosa es cuando se utiliza la crisis para hacer un ajuste de plantilla. Ahora hay que frenar la sangría de destrucción de empleo. Donde la movilización sea una solución vamos a movilizar.
-¿Hasta dónde llegará la crisis? Hay mucha incertidumbre entre los trabajadores, miedo a perder el empleo. -La situación es muy complicada. En Extremadura el porcentaje de participación de la construcción en el PIB es mayor todavía que en España. Si a eso unimos que el sector industrial y los servicios de alto nivel son muy raquíticos tenemos una estructura del empleo muy vulnerable, con unas tasas de temporalidad muy altas. Si le añadimos que el empleo público de los ayuntamientos es también precario, destruir empleo en Extremadura es tremendamente fácil. En el último trimestre se han destruido 20.000 puestos de trabajo. Es una situación complicada en una región donde además ya teníamos problemas de empleo. Tenemos las tasas de actividad y de ocupación más bajas del país.
«Hacer reformas» -Los datos de enero son desoladores. -Hay un elemento en Extremadura que no se ha analizado mucho y que es importante y es que en el cuarto trimestre de 2008 además de pérdida de empleo ha habido un descenso de 4.000 personas en la población activa. Son personas que, o pasan a la economía sumergida o que no tienen perspectiva de trabajo y se dan de baja. El mercado laboral extremeño tiene una característica: que destruye empleo con mucha facilidad y por otro lado expulsa a gente de la población activa. De ahí que nosotros insistimos en que hay que hacer reformas estructurales. No podemos seguir con un tejido productivo en el que el 30% del PIB o más está en la construcción y el sector primario. No puede ser que el 7% esté en la industria. Hay que cambiar la estructura económica de la región. Hay que trabajar en las infraestructuras, el AVE, la Plataforma Logística.
-¿Los fondos de empleo para los ayuntamientos ayudarán contra el paro? -Estas políticas debe ir acompañado de la exigencia a las empresas que han generado beneficios para que tengan un compromiso social. No puede ser que una empresa tenga un capital social de sólo 100.000 euros y haya tenido 200 trabajadores. Lo que ha pasado es que los beneficios se los han embolsado los socios y no han capitalizado la empresa. Eso provoca que en caso de crisis la capacidad para responder sea mínima. El capital social no puede responder. Los beneficios, lejos de ir a la empresa, han ido al patrimonio de los accionistas. La situación de crisis se está viviendo por las empresas y los trabajadores, pero no por los accionistas. Al final, los que pagan son los trabajadores.
«El tamaño importa» -Siempre que hay crisis se reclama abaratar el despido. Lo ha hecho el gobernador del Banco de España. -Nosotros le decimos al gobernador que se dedique más a lo suyo y menos a las tareas del ministro de Economía. El Banco de España está para saber qué márgenes de maniobra tiene la banca española. Esta crisis no tiene nada que ver con el mercado de trabajo. Si no fuera flexible no se hubiera destruido un millón de puestos de trabajo en 2008. Una de las características del mercado de trabajo español es que es muy flexible. En Extremadura el 40% son contratos temporales, con lo cual es facilísimo destruirlos. El origen de la crisis no es un problema laboral. Es del sistema capitalista llevado a sus extremos más liberales. Pedir que se abarate el despido son salidas de tono que pretenden eludir responsabilidades.
-¿Y qué le parece la propuesta de nacionalizar bancos? -No hay que rasgarse las vestiduras por propuestas como la que ha hecho el presidente de la Junta de nacionalización de la banca. Aquí hemos tenido banca pública hasta ayer por la mañana. Otros países lo están haciendo.
-¿Cómo ve que se acelere la fusión de las cajas extremeñas? -Creo que es necesaria y que hay que agilizarla. Es mejor una fusión por voluntad que por necesidad. Un sistema financiero como el español, que yo dudo que no esté tocado...
-Pero se ha presentado como el mejor de Europa. -Sí, pero yo dudo que no esté tocado. No por nada, sino porque tiene microentidades donde si no se han hecho bien las cosas cualquier morosidad importante acaba con sus beneficios y no puede responder. El tamaño es importante. Y las cajas son fundamentales para la región. Hay proyectos empresariales que se podrán afrontar mejor con una entidad más grande. Fusión sí y que se pongan a trabajar los dos consejos de administración cuanto antes. Y es importante una mayor presencia de la sociedad civil en los órganos de las cajas. Menos presencia de los partidos y más sociedad civil. Vamos a reivindicar una presencia sindical en los órganos de gobierno.
-¿Y si la fusión supone destrucción de empleo? -Hay que ver la situación global. En unos casos puede haber recolocaciones, en otros un rejuvenecimiento de plantilla paralelo a un plan laboral, un montón de cosas. Es bueno que se pongan a trabajar cuanto antes y afloren todas las cuestiones que sobre la mesa. También hay que homogeneizar salarios y condiciones sociales.
-Después de casi cinco años de mandato se presenta a la reelección. ¿No va a haber más candidaturas? -Creo que no, aunque basta tener el aval del 10% de los delegados para presentarse. Pero el sindicato goza de una cohesión importante y se ha hecho un balance positivo. Hay un convencimiento de que debe haber continuidad. El equipo va a ser similar y se va a incorporar gente joven y nueva.
-¿A los sindicatos también va a llegar la crisis y se tendrán que replantear sus funciones? -Hay que estar adaptándose constantemente. En Extremadura sí tenemos retos importantes. No lo hemos hecho todo lo bien que debiéramos. Hay que darle un componente más sociopolítico. El sindicalismo tiene que dar un giro y abordar la negociación colectiva de manera diferente. Los trabajadores no perciben el convenio colectivo como su referencia en las condiciones laborales. Hay cosas que no estamos haciendo bien. Creo que los sindicatos tenemos que estar más presentes en las empresas.

jueves, febrero 12, 2009

La CEOE rompe de manera unilateral el Dialogo Social

La patronal CEOE afirma que no firmará ningún nuevo Acuerdo Interconfederal para la Negociación Colectiva si éste no está acompañado de "una reforma laboral integral"

Los sindicatos ya pueden darse por enterados: la patronal CEOE no firmará ningún nuevo Acuerdo Interconfederal para la Negociación Colectiva si éste no está acompañado de “una reforma laboral integral”. Es decir, que, según los empresarios, un eventual acuerdo salarial tendría que recoger, como mínimo, un nuevo recorte de la indemnización en el despido improcedente del trabajador. De lo contrario que ni el Gobierno ni los sindicatos cuenten con la patronal.
Éste es el mandato que, en este ámbito, recibió ayer el presidente de CEOE, Gerardo Díaz Ferrán.
Según informa EXPANSIÓN, el Comité Ejecutivo de la CEOE [previo a la Junta Directiva] ha decidido lo siguiente “sobre la posición a adoptar en el marco del Acuerdo Nacional para la negociación colectiva y sobre el aumento máximo de salarios a acordar: la necesidad de una negociación globalizada, en la que ha de pretenderse una reforma laboral integral”.
Es decir, incluyendo la flexibilización del despido, de acuerdo con las constantes reclamaciones de los empresarios. La última, de la patronal madrileña CEIM, que en realidad es de la misma CEOE, con un contrato indefinido con una indemnización de veinte días por año trabajado –ver información en esta misma página–. En segundo lugar, y en consecuencia con este primer punto, CEOE ha decidido “que no se firme el acuerdo de convenios, salvo que su clausulado sea razonable y que se intente por todos los medios que su vigencia sea a largo plazo”.
Estas posiciones se producen tras la oportuna intervención del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez,que pidió ayer una “reforma urgente del mercado laboral”, para que la economía pueda volver a crecer por encima del promedio europeo cuando pase la crisis.
El insigne gobernador culpó a la indemnización por despido del paro que actualmente azota nuestro país. El hecho de que parte de la ayuda al desempleo dependa del último salario “desincentiva”, según Ordóñez, la movilidad laboral así como la contratación de nuevos trabajadores. Esta apreciación es falsa. Como conocedor del mundo de trabajo desde hace años, la los trabajadores buscan la estabilidad y unas buenas condiciones de trabajo. Si lo que plantea el "Insigne" es que la gente deje sus empleos estables para ocupar puestos precarios. Los trabajdores son eso, trabajadores, no TONTOS. Por otro lado considero que es cuestionable éticamente plantear esta cuestión en un momento como este, donde el sector financiero que él lidera, es el causante del sufrimiento de millones de personas en España y el mundo en los últimos 6 meses. Éticamente es inadmisible que se utilice el momento de debilidad de los trabajadores y trabajadoras para aplicar recetas FRACASADAS.
Tanto el cambio de estrategia de la patronal en la negociación con los sindicatos como las importantes declaraciones de Fernández Ordóñez sobre el despido, introducen presión sobre el Gobierno. El pasado martes, el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, reiteró ante el Congreso de los Diputados que no hará ninguna reforma laboral ni social “que no cuente con el respaldo de la patronal y de los sindicatos”. El sindicalismo español no debe perderse en los fuegos artificiales de estos personajes. Su posicionamiento debe ser firme en la defensa de los intereses de los trabajadores, que son los intereses del 99 por ciento de la sociedad, que no es otra que protección ante el desempleo y generación de una economía productiva sostenible y ética, basada en la I+D+i. España tiene que perder su imagen de "nuevo rico" para prepara su futuro alejado de especuladores y sinvergüenzas, vendedores de humo y mierda.
En el mensaje de CEOE, por “reforma laboral integral” debe entenderse la posibilidad de alcanzar sus propuestas más ambiciosas. Es decir, algunas de las siguientes: un recorte de la indemnización por despido improcedente hasta los veinte días por año de trabajo, con un cuantía máxima de 12 meses de salario.
Actualmente, la compensación por este tipo de despido está en 33 días por año de trabajo, hasta una cuantía máxima de dos años de salario, si se trata del contrato salido de la reforma laboral de 1997, o de 45 días por año en la empresa, si es el contrato indefinido ordinario.
Directamente relacionado con esta cuestión, los empresarios desearían suprimir el permiso administrativo para el despido colectivo, lo que, a su juicio, agilizaría la toma de decisiones de las compañías. Otra cuestión que busca la patronal desde hace tiempo es tener mayor flexibilidad en la movilidad laboral, tanto geográfica como funcional y, relacionado directamente con este último punto, está la pretensión de flexibilizar el contrato a tiempo parcial.
En el capítulo de costes, y junto al recorte de la indemnización por despido, los empresarios quieren una rebaja de las cotizaciones sociales en todos los contratos. En consecuencia, CEOE piensa que la negociación del acuerdo de convenios puede embarrancar o, incluso derivar en otra cosa, si consigue sentar al Gobierno con la reforma laboral. Buenos tiempos para la lírica.

miércoles, febrero 11, 2009

La Mentira de crear empleo abaratando el despido.

Nuevamente nos encontramos con la cantinela de la CEOE de abaratar el despido para crear empleo. Si estuviéramos en un cuento veríamos como les crece la nariz cada vez que lanzan este mensaje. Pero estamos en la vida real y en la crisis real y lo único que crece cuando dicen estas cosas, son los parados y paradas y las expectativas de incremento de la cuenta de resultado. Los principios que sustenta esta "petición" son inmorales y por ello condenables. Son los mismos principios que han generado la crísis y los especuladores. Verdaderos tenderos de la mierda empaquetada "en cómodos plazos de felicidad", como diría Pablo Guerrero.
A continuación reproduzco las reflexiones del Catedrático de Economía Aplicada Juan Torres López sobre estos asuntos.

Mentiras

Durante estos años de políticas neoliberales se ha dicho que había que moderar los salarios para que así las empresas tuvieran beneficios y pudieran crear empleo. La secuencia parece lógica pero no es cierta. Estos días acabamos de ver nuevos ejemplos de su falsedad.

  • Día 28 de enero: El Banco Santander anuncia un beneficio neto atribuido de 8.876 millones de euros en 2008.
  • Día 9 de febrero: El Banco de Santander remodela su banca de consumo y prescindirá del 30% de su plantilla.
Las empresas desean que los salarios sean bajos pero para tener más beneficios por la vía más cómoda de ahorrarse costes de personal no para crear más empleo.
Lo han conseguido en los últimos años y ahí están las desigualdades que se han ido agrandando. Pero ese incremento en los beneficios no necesariamente deriva en más empleo. En los últimos decenios hemos podido comprobar que una gran parte de los beneficios se han destinado a la especulación financiera o inmobiliaria, de modo que no han llevado consigo la inversión productiva que podían haber generado. Otras veces, puede ser que se apliquen a nueva inversión, pero tampoco está asegurado que esa inversión cree puestos de trabajo, ya que puede estar dedicada a incrementar el capital fijo, la tecnología, ...
La presunción de que salarios más bajos dan lugar a más beneficios, los mayores beneficios a más inversión y ésta a más empleo es eso: una presunción.
La realidad es que los salarios más bajos producen otros efectos: por un lado, las empresas tienen más beneficios y más poder, lo que les permite imponer condiciones más favorables en sus relaciones con los trabajadores. Por otro, tienen un efecto paradójico y perverso. Si una empresa logra salarios más bajos, reduce sus costes y puede obtener más beneficios. Pero si eso lo hacen todas las empresas (como ha ocurrido en los últimos años) lo que sucede es que disminuye la demanda potencial total que hay en los mercados puesto que ésta depende en gran medida de la capacidad de compra de los trabajadores. El propio Henry Ford lo decía: "todos los capitalistas del mundo somos insuficientes para comprar todas las mercancías que producimos".
Esto es lo que ha hecho que bajo el neoliberalismo de los últimos años el crecimiento potencial de las economías haya sido tan bajo y que se haya creado mucho menos empleo y más precario.
Los economistas que defienden la tesis de que hay que moderar los salarios para crear empleo parten de un presupuesto erróneo: consideran a los salarios solo como un coste cuando en realidad son también una componente de la demanda y un factor decisivo de la productividad (por eso cuando más bajos son las economías suelen ser también menos productivas, menos competitivas y más empobrecidas e empobrecedoras).
Pero no se trata de un simple error teórico: da la casualidad de que ese "olvido" es lo que permite divulgar como científica una tesis que solo beneficia al capital.
La paradoja es que los capitalistas podrían ganar más dinero si pagaran salarios más elevados a sus trabajadores porque de esa forma tendría a su disposición mercados más amplios (basta con comprobar la parte tan grande la humanidad que está fuera del mercado de bienes y servicios) pero si lo hicieran perderían poder. Y sin poder en manos de los empresarios lo que estaría en peligro no sería el beneficio sino el propio capitalismo y los privilegios de los capitalistas y de quienes de viven de ellos y a su servicio.
Es por esa misma razón que tampoco les conviene que haya pleno empleo aunque con éste pudieran ganar más: porque con empleo asegurado los trabajadores tienen más poder y pueden poner en cuestión la jerarquía y la injusticia de base sobre la que se sostiene el capitalismo.
Y también por eso ha estado de moda decir en los últimos años que para crear empleo lo que hay que hacer es flexibilizar las relaciones laborales. Lo que tampoco es verdad: quieren flexibilizarlas también para tener más poder, pero no porque sea necesario para obtener más beneficio o para ser más competitivos.
Lo acaba de decir muy claro uno de los mejores conocedores de los mercados laborales, el Premio Nobel de Economía Robert Solow: "España necesita tecnología, no flexibilidad laboral".
Los empresarios saben muy bien todo esto. Saben que lo que de verdad necesitan es poder y es por eso que se han cuidado, sobre todo, de quitárselo a los trabajadores, por ejemplo, consiguiendo domesticar a muchos sindicatos.
Y es también por todo ello que el neoliberalismo esté coincidiendo con una pérdida paulatina de pulsión democrática en todas nuestras sociedades.
Lo que indica que lo que habría que hacer es crear las condiciones para que los trabajadores tengan más poder y evitar que se concentre cada vez más en manos del capital.

viernes, febrero 06, 2009

Proteccionismo Laboral y dumping social: algunos interrogantes sobre la huelga británica.

Desde hace unos días quiero hacer una entrada con el gravísimo tema de la Huelga xenófoba en Reino Unido, bien es cierto que estaba siguiendo con muchísimo interés las entradas de López Bulla, en su blog (Metiendo bulla). El artículo de Antonio Baylos, creo que aporta claves necesarias para reflexionar sobre el conflicto. Nos encentramos ante una crisis derivada de la financiarización global de la economía productiva, los impulsos al neoproteccionismo de los Estados-nación son muy fuertes. Ya conocemos su versión sobre el consumo de productos nacionales y sobre la protección frente a los intercambios comerciales. Pero hay también un proteccionismo del trabajo que a veces se liga a las políticas industriales de apoyo de sectores relevantes.
El tono de algunas informaciones es inequívoco: los sindicatos ingleses, infiltrados incluso los trabajadores por fascistas del Partido Nacional Británico, abogan por impedir la contratación de trabajadores extranjeros en una refinería situada en la costa este de Gran Bretaña. “Trabajadores ingleses para puestos de trabajo ingleses”, lo que hace que los periodistas hayan denominado a estas acciones de protesta como una “huelga xenófoba”.
Quizá el tema sea un poco más complicado. Primero porque no son los sindicatos británicos los que organizan, en cuanto tales, el conflicto. Su estructura es muy complicada, y el órgano confederal que representa al sindicalismo en aquel país, no ha organizado esta protesta, de origen bastante europeísta. López Bulla, con su rapidez y sensibilidad para captar los problemas reales del sindicalismo europeo y global, le ha dedicado cuatro entradas en su blog. En esas entradas subraya hechos bien relevantes que no se valoran apenas en el espacio mediático español. “Se ha dado en un escenario que tiene mucho que ver con la globalización: una trasnacional de “bandera” norteamericana contrata una empresa siciliana que lleva a Inglaterra trabajadores italianos y portugueses a trabajar para una empresa francesa” – nos cuenta Metiendo Bulla. Y añade su corresponsal Walter Maldonado: “Brendan Barber, secretario general del TUC, fue claro: “La rabia debe dirigirse contra los empresarios, no contra los trabajadores italianos. No hay duda que habrá gente de nuestro país que intentará instrumentalizar los miedos de los trabajadores fomentando la hostilidad y la xenofobia, pero estoy seguro que los afiliados al sindicato orientarán su rabia hacia los empresarios que han causado esta situación, que aparece como un intento de golpear los salarios, las condiciones de trabajo y la representación sindical del personal”.
Lo que por tanto nos señala un cabo de la polémica que quizá no se pone mucho de relieve en el tratamiento mediático de la cuestión. Quizá los trabajadores contratados por las empresas extranjeras para prestar servicios en Inglaterra posiblemente tengan unas condiciones de trabajo y unas remuneraciones diferentes y posiblemente más bajas que las que corresponderían a unos trabajadores británicos. No lo sabemos de cierto porque de eso no se habla. Pero si fuera así, el conflicto se desarrollaría entre el proteccionismo del mercado de trabajo nacional y el rechazo de la utilización de la libertad de prestación de servicios internacional como fórmula de romper la unidad de negociación y las condiciones de empleo en un país determinado. Es decir, que el slogan “trabajos británicos para trabajadores británicos” podría ser una variante extremadamente proteccionista del más conocido “salarios suecos en Suecia” que los sindicatos de aquel país acuñaron en el conflicto con la empresa letona “Laval” que ganó un concurso público para construir una escuela en un municipio sueco pagando a sus obreros conforme al convenio colectivo de su país de origen, lo que originó una huelga de los sindicatos suecos para evitar el “dumping social” que esta operación facilitaba. Como se sabe, este es el supuesto base de una de las sentencias más criticadas del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, el conocido Caso Laval, junto con el Caso Viking, ambas de diciembre de 2007.
Es cierto además que en esta crisis derivada de la financiarización global de la economía productiva, los impulsos al neoproteccionismo de los Estados-nación son muy fuertes. Ya conocemos su versión sobre el consumo de productos nacionales y sobre la protección frente a los intercambios comerciales. Pero hay también un proteccionismo del trabajo que a veces se liga a las políticas industriales de apoyo de sectores relevantes – como el automóvil – y en ocasiones se materializa en la regulación de los flujos migratorios y en “cerrar” los mercados de trabajo nacionales a la presencia de trabajadores inmigrantes o, en casos extremos, la criminalización de los que se encuentren en un territorio nacional en situación “irregular”. El proteccionismo laboral es una variante añadida a estas pulsiones de reacción frente a la crisis, y el supuesto de la huelga por los contratos realizados en la refinería de la costa de Lincolnshire, un ejemplo del mismo. Pero simultáneamente expresa la protesta de los trabajadores de un país por la utilización de operaciones empresariales de prestación de servicios que llevan aparejadas la división entre los trabajadores a partir de la diferencia salarial y de condiciones de trabajo entre ellos en función de su nacionalidad.
Naturalmente que es un asunto sobre el que el sindicalismo europeo tiene que intervenir estratégicamente, es decir, a partir de ese hecho elaborar unas pautas de análisis y de propuestas de acción. Y es evidente que los distintos sindicalismos estatal-nacionales deben también utilizar esta experiencia como medio para reflexionar sobre su capacidad para “ exponer nuevamente la reconstrucción de los valores de la solidaridad y la reunificación del conjunto asalariado en sus diversas tipologías”, como afirma Metiendo Bulla. Pero destacar de estas acciones únicamente su carácter xenófobo creo que impide ver el otro lado del problema, que sin embargo, es el que arroja más luz sobre el problema subyacente.
Antonio Baylos es Catedrático de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social de la Universidad de Castilla La Mancha

miércoles, febrero 04, 2009

Los paises con una sindicación más alta son son más ricos y tienen más bienestar social

Un informe de la Comisión Europea señala que las negociaciones salariales entre los interlocutores sociales tienen repercusiones en las diferencias de remuneración entre hombres y mujeres, las desigualdades salariales y la pobreza de los trabajadores. Un aumento del 10% en la tasa de sindicación reduce las desigualdades salariales un 2%. Y un incremento del 10% en la cobertura de las negociaciones colectivas conlleva una bajada del 0,5% de la pobreza en el trabajo.
España es uno de los países de la Unión Europea con menos trabajadores afiliados a los sindicatos (sólo el 15% del total) y con un mayor número de empresas inscritas en las patronales (el 72%), según un informe sobre las relaciones industriales en los Veintisiete publicado ayer por la Comisión Europea. Pese a este desequilibrio, el 83% de los trabajadores españoles están cubiertos por convenios colectivos, dado el marco de relaciones labaorales existente en nuestro país, lo que influye en la percepeción de que es inecesario estar afiliado para conseguir los beneficios del trabajo de los propios sindicatos. Esto pone de manifiesto que se tienen que realizar campañas por parte de los sindicatos españoles, que informen y conciencien de la necesidad de afiliación, dándo a conocer así mismo de manera más incisiva en la importancia de potenciar las organizaciones sindicales.
El Ejecutivo comunitario destacó que el grado de cobertura de los convenios colectivos refleja generalmente la fuerza relativa de los interlocutores sociales en cada país, y especialmente de las organizaciones empresariales. Los porcentajes más altos se registran en Austria (99%), Bélgica (96%), Francia y Eslovenia (95%), Suecia (92%), Finlandia (90%) y España (83%). En general suele suceder que a mayor cobertura menor grado de sindicación.
El comisario responsable de Empleo y Asuntos Sociales, Vladimir Spidla, aseguró que el diálogo social entre patronal y sindicatos puede ayudar a la UE a hacer frente a la actual crisis económica y a aplicar el plan de recuperación pactado por los Veintisiete.
"Unas relaciones industriales de alta calidad son un elemento clave a la hora de gestionar los cambios económicos y reducir sus costes, ayudando a las empresas y a los trabajadores a adaptarse a estos cambios y protegiéndolos al mismo tiempo de shocks transitorios", dijo el Ejecutivo comunitario.
En el conjunto de la UE, el porcentaje de trabajadores afiliados a los sindicatos ha descendido ligeramente desde el 28% en el año 2000 al 25% en 2005 y, en líneas generales, es superior entre los antiguos quince Estados miembros (26%) que en los países de la ampliación (22%).
Suecia (76%), Finlandia y Dinamarca (72% cada uno) son los países con mayor número de trabajadores afiliados a los sindicatos, mientras que las tasas más bajas se registran, además de en España, en Francia (9%) y en Polonia y Letonia (13% cada uno).
Por lo que se refiere a la asociación de las empresas en patronales, las mayores cuotas corresponden a Austria (100%), Países Bajos y Francia (78% cada uno), Luxemburgo y Bélgica (72% cada uno) y España (70%), según datos referidos al año 2006. Como podemos observar parace que los emprearios españoles tienen más claro la necesidad de asociarse que sus trabajadores.

lunes, febrero 02, 2009

La Crisis es una oportunidad para las alternativas desde abajo y a la izquierda

Reproduzco para la reflexión una entrevista al profesor Jaime Pastor, experto en el movimiento antiglobalización, publicada en el periódico digital Nueva Tribuna para hacer balance del Foro Social Mundial que se está celebrando en Belém (Brasil) esta semana. Una reactivación de los movimientos sociales y una puerta abierta para la izquierda del siglo XXI.
Jaime Pastor nos recibe en su casa ubicada en el castizo barrio de Chamberí. Sentado en su sofá y con su gata al lado, responde con reflexión a cada una de las preguntas. Domina el tema, no sólo le interesa, más bien le apasiona. Su participación en los FSM es activa y teórica. Los movimientos sociales han sido parte de su biografía, dentro y fuera del campo de batalla, como activista y como investigador universitario. Se mantiene en los dos frentes.
Pregunta: ¿Qué expectativas tenemos del FSM de Belém 2009? Jaime Pastor
En Belém se ha generado una reactivación del Foro Social Mundial, ha vuelto a acudir gente que en los últimos años no había asistido. Las cifras que se dan son de alrededor de 100.000 personas, de las cuales obviamente la mayoría es brasileña. Un amigo que se encuentra allí me comentaba que ha aparecido un nuevo componente de gente joven muy importante y una gran participación es un factor fundamental en este tipo de encuentros. También me parece importante destacar que por el hecho de que se celebre en Belém, que es una zona que amazónica, se le ha dado una relevancia a la problemática del Amazonas, del cambio climático y a la lucha contra éste.
LA CRISIS MUNDIAL EN EL FSM
P- ¿Qué líneas de análisis y actuación debe llevar este Foro en un momento de crisis global agudo como el que se está viviendo? J. P. Están los diez ejes temáticos que se están llevando a discusión y que tratan de temas que ya tenían gran importancia antes de la crisis y que evidentemente con la situación que tenemos pasan a estar de plena actualidad. Es necesario que el FSM se pronuncie sobre los impactos de la crisis global que asistimos y que ofrezca no sólo espacios de encuentro y reflexión sino también propuestas de acción.
P- ¿Cómo cuáles? J. P. Se ofrecen muchas alternativas, gran parte de ellas se recogen en la Declaración de Pekín y ofrecen respuestas coherentes frente a la crisis mundial global. Pero no hay que olvidar que antes de la crisis financiera económica y social que se está padeciendo ahora con más intensidad, ya sufríamos otras crisis como la del cambio climático, la energética, la alimentaria o la propia guerra de Irak, y también hay que seguir trabajando sobre esos temas. Por otro lado hay que saber que una cosa es el Foro Social Mundial y otra cosa es la Asamblea de Movimientos Sociales. En el Foro hay que funcionar por Consenso y no se pueden pedir grandes respuestas concretas pero en la Asamblea sí tiene a una práctica en llegar a establecer una Agenda de lo social.
P-¿Cuáles son los puntos más débiles del Foro Social Mundial? J. P. En el caso concreto de lo que ha acontecido en Belém se ha denunciado el alto coste de las entradas para asistir al encuentro. Lo que es en sí mismo una forma de discriminación para aquellas personas más pobres que se vean imposibilitadas para asistir. Parece ser que también se han producido problemas de organización en el mismo evento, pero es bastante habitual. Respecto a los FSM en general, me parece que últimamente se ha ido revelando una crisis de representatividad del Consejo Internacional del FSM, ya que hay una sobrerepresentación de determinadas ONG’s o de sectores que bajo mi punto de vista no reflejan suficientemente el proceso de maduración del movimiento de movimientos, y que se limitan a la mera crítica al Foro de Davos y a las políticas neoliberales, pero no dan un paso más adelante y pasan de la resistencia a las alternativas.
LOS POLÍTICOS TOCAN LA PUERTA DEL FSM
P- La asistencia de líderes políticos como Lula, Evo Morales o Hugo Chávez, son un elemento nuevo que se incorpora al Foro De Belém y que ha creado mucha polémica. J. P. Sí, es una situación novedosa y el Foro tiene que evitar subordinarse frente a los Gobiernos, aunque éstos sean de izquierdas. En el caso de Lula no se puede decir que su gobierno haya adoptado unas políticas que en lo fundamental hayan roto con el paradigma neoliberal. Es cierto que ha dado ayudas a los pobres, pero su política es diferente a la de otros gobiernos más a la izquierda como Evo Morales o incluso Hugo Chávez. De todas maneras es importante para el FSM que aunque asistan jefes de gobierno, el Foro preserve su autonomía frente a ellos. Está claro que en aquellos puntos de convergencia será positivo que haya alianzas puntuales, pero es importante que los movimientos sociales sean autónomos y no se subordinen a las políticas gubernamentales. Creo que es un reto importante para el Foro Social Mundial.
P- ¿No se podría entender que con la crisis que tenemos los líderes políticos pretendan prestar más atención al FSM? J. P. Los lideres políticos no van a escuchar sino a soltar su mitin respectivo. Evidentemente si acuden al FSM por lo menos tendrán en cuenta lo que se discuta, los ejes temáticos y las conclusiones que se puedan sacar. Pero las conclusiones van ser más de la Asamblea de Movimientos Sociales que del Foro Social como tal. Creo que Lula debería acercarse primero al MST (Movimiento Sin Tierra) y todos sabemos que hay un enfrentamiento muy claro entre el MST y el presidente de Brasil. También está el tema del Amazonas y de los transgénicos que han enfrentado a los movimientos sociales brasileños con su Gobierno. Por otro lado en un foro como este se discute de problemas como el del cambio climático y en ese sentido el petróleo sale muy mal parado, lo que no le va a hacer mucha gracia a Venezuela. Podrá haber una buena voluntad por parte de estos líderes políticos pero creo que también va a haber cierto intento de neutralización y de limitación de los propios objetivos del Foro, por eso mismo es ahora más importante que esta plataforma de encuentro señale su autonomía.
P- El FSM de Belém se celebra a pocas semanas de la toma de posesión de Obama. ¿Esta nueva situación influirá en el encuentro y en sus temas a tratar? J. P. El fin de la era Bush es un aspecto importante a tener en cuenta y evidentemente plantea nuevos retos. Sabemos que Obama no va a ser igual que su antecesor, ya estamos viendo ciertos signos de cambio pero también ciertos signos de continuidad de la era Bush. El mejor ejemplo es la guerra de Afganistán o la falta de una condena clara de lo que ha sido la masacre de Gaza por parte del ejército israelí. Hay que analizar con clarividencia los signos de continuidad y de discontinuidad. Parece que en la lucha del cambio climático hay una actitud más abierta por parte de Obama, que por otra parte no es difícil ya que Bush no hizo absolutamente nada. Por supuesto que Obama continuará con las políticas neoliberales, pero estamos ante una versión distinta de lo que sigue siendo el imperialismo estadounidense y desde ese sentido el FSM debe mantenerse muy exigente con Obama.
OTRO MUNDO ES POSIBLE, OTRO CAMINO: DESDE ABAJO Y A LA IZQUIERDA
P-La frase que caracteriza a los FSM de ‘Otro mundo es posible’ a veces se tacha de ingenua. Estos encuentros hacen buenos diagnósticos sobre los problemas del neoliberalismo, pero a veces parece que carecen de una acción más sólida. ¿Qué le parece? J. P. En el terreno más pragmático también hay alternativas. La Declaración de Pekín muestra propuestas concretas como la soberanía alimentaría, la supresión de los paraísos fiscales, reconversión ecológica de la economía, la nacionalización de la Banca. La última propuesta que señalo es algo que ya se están planteando algunos de los países más neoliberales. Hay muchas propuestas, pero es cierto que tiene que ir acompañadas de una agenda de acción, tarea que corresponde a la Asamblea de los Movimientos Sociales. Ya hay algunas fechas previstas para llevar a cabo acciones, la Cumbre del G20 que va a celebrar en Londres el 2 de Abril, y ante la Cumbre de la OTAN que festeja su 60 aniversario el próximo 4 de abril. Ahí se establecerá una agenda más sólida. Hay que tener en cuenta que el Foro Social Mundial no reúne a todo el movimiento antiglobalización. Estas navidades estuve en Chiapas en el Primer Festival Mundial de la Digna Rabia en el que participaban otros muchos colectivos que habían adquirido un eslogan que complementa muy bien al de Otro Mundo es posible. Ellos dicen: ‘Otro mundo es posible, otro camino: desde abajo y a la izquierda’. Lo que se trata es que el movimiento de movimientos no se preocupe tanto de instituciones como el FMI, el Banco Mundial o la OMC, que ya están más que desprestigiadas y que hagan una verdadera ruptura de esas políticas neoliberales desde una lógica de otro mundo. Hay que dar una respuesta a esa perplejidad que ha generado tanto a los de arriba como a los de abajo la crisis actual. Esta crisis tiene que ser vista como una oportunidad para ofrecer vías de construcción y alternativas, desde abajo y a la izquierda.